Los municipios guipuzcoanos de Irún y Hondarribia cambian las llaves del contenedor marrón por tarjetas magnéticas para controlar su uso y bonificar a quienes separen en origen el residuo húmedo (orgánico).

Las cerraduras de los contenedores de materia orgánica de la comarca del Bidasoa (Gipuzkoa) van a abrirse mediante una tarjeta magnética. Con este cambio, todos los usuarios del contenedor marrón deberán hacerse, en las próximas semanas, con la nueva tarjeta magnética. Dicha tarjeta está vinculada a cada familia titular de un contrato de recogida de residuos y memoriza automáticamente cada uso que se hace de ella.

De este modo, se podrá controlar el uso efectivo del contenedor marrón y aplicar, con ello, la tarifa de residuos reducida a quienes separen en sus hogares la materia orgánica. La tarifa que se aplicará en 2017 a los usuarios del contenedor marrón será un 39% más barata que la de aquellos que no lo hagan.

Se considerará que se hace un uso efectivo del contenedor marrón cuando se utilice un mínimo de tres veces al mes (en días distintos) durante un mínimo de nueve meses al año. De este modo, se quieren prever situaciones de ausencias temporales o vacaciones. La revisión y verificación de uso se hará a final de año y quienes no cumplan con los requisitos de uso deberán pagar la diferencia entre las dos tasas existentes (hasta un máximo de 53,20 euros).